"...estrecharon las manos, hacía calor ahora, mucho calor, el príncipe revisó satisfecho la firma mientras el contaba las monedas, las mujeres y la fama, sin siquiera sospechar de la desmesura del ofrecimiento, de su cordialidad impostada, tan aturdido estaba, entre el azufre y la farsa, como para notar nada, la cola roja develada al irse el diablo entre carcajadas, simpático y con su alma recién comprada..."
lunes, 9 de noviembre de 2009
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1 comentario:
mmm.. me trae malos recuerdos.. como que me remite a algo..
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